miércoles, 11 de marzo de 2020

Literatura automovilística (I): Manual de Rallies

Además de la pasión que ya conocen, la cual me ha llevado a crear este blog y hablar sobre ella, tengo otra afición muy grande, leer. Y cuando ésta lectura es sobre automovilismo ya se convierte en uno de los mayores placeres que puedo tener.
Es por ello que he decidido comenzar esta nueva serie, haciendo revisiones y comentarios sobre los libros que poseo en mi colección. Aquí hablaré un poco sobre el contenido del libro, el autor, mi opinión sobre la calidad del libro y cómo lo conseguí, además de algunas recomendaciones sobre dónde adquirirlo.

Para ésta primera entrega de la serie elegí un libro que considero una reliquia y que me hizo mucha ilusión comprar. Me refiero al Manual de Rallies, escrito por Àlex Romaní.
Para un apasionado de los rallyes como yo, además de tener el gran sueño de poder disputar uno algún día, leer este libro es indispensable. A principios de los años 2010 empecé a conocer sobre su existencia y me puse manos a la obra en su búsqueda. Desgraciadamente me encontré con la sorpresa de que el libro ya estaba descatalogado en todas las librerías en España. Se trata de un libro salido al mercado en el año 1997, cuya segunda edición corresponde al año 2000, siendo ésta la última. La búsqueda se complicaba. En el año 2012 o 2013 logré conseguir la primera edición a préstamo a través de la biblioteca pública de Tarragona, la ciudad donde vivía por aquel entonces. Su lectura fue fascinante, lo que hizo que deseara con aún más ganas poder adquirirlo.

Portada de la primera edición del Manual de Rallies
Tras años buscando y llegando a un punto de frustración en el que pensé que nunca lo conseguiría, llegó diciembre de 2018, cuando fui de vacaciones con mi novia a Buenos Aires. Antes del viaje, buscando por MercadoLibre, encontré que una persona vendía la segunda edición del libro a sólo 200 pesos argentinos (aproximadamente 2.500 pesos chilenos o 3 euros). No lo dudé un segundo y me puse en contacto con dicha persona para coordinar la compra.
Recuerdo perfectamente encontrarme con él en una estación de subte tras una visita al Cementerio de la Chacarita durante la mañana. Mientras me entregaba el libro mi mente me daban ganas de decirle "Estás prácticamente regalando una reliquia". Es así como por fin conseguía el libro que buscaba desde hace varios años.




EL AUTOR
Àlex Romaní es quizás uno de los copilotos más reputados en el rally en España, con gran renombre también a nivel internacional. Ha cantado las notas para pilotos de la talla de Gustavo Trelles, Jesús Puras o Daniel Solá, con quien se proclamó campeón del mundo júnior en el año 2002, a lo que suma numerosas victorias a nivel nacional e internacional. Además ha sido director de cursos de la Federación Catalana de Automovilismo y actualmente es uno de los directores del Rally Costa Brava.
Desde su debut a mediados de los 80, Romaní ha sido uno de los grandes responsables del desarrollo de la profesión de copiloto, gracias a los cursos dictados y a las obras publicadas, como el vídeo Ser copiloto de rallyes, y el libro que nos ocupa en este artículo, Manual de Rallies.

Àlex Romaní
CONTENIDO
El libro consta de 352 páginas, repartidas en 15 capítulos, en las que el autor hace una descripción bien detallada de todo lo que involucra al mundo de los rallies.



Esta segunda edición cuenta con un prólogo escrito por Richard Burns, piloto británico campeón del mundo en 2001, quien falleció en 2005 tras perder una larga batalla contra el cáncer.


Tras una breve introducción, el autor nos explica en el primer capitulo en qué consiste esta disciplina del mundo motor, desde las características de un rally, su organización, pasando por los organismos oficiales encargados y los vehículos habilitados para competir.


A continuación, Romaní nos explica un punto muy importante, que es el cómo iniciarse en la competición. Debido a la antigüedad del libro, parte de la información sobre las fórmula de promoción ha quedado obsoleta. Además, estos datos, así como los de los datos sobre escuelas de conducción y tipos de licencia disponibles están basados en la realidad española. Sin embargo sirve de gran ayuda para hacerse una idea aproximada de los pasos que hay que seguir.


Seguidamente encontramos un capítulo donde se explica el perfil que debe de tener tanto un piloto como un copiloto de rallyes. Además, el autor nos presenta diversos ejercicios para entrenar la agilidad mental, la capacidad de concentración y la habilidad de cálculo (labor muy importante del copiloto), así como una mención de preparación física y nutrición.






El capítulo que nos encontramos después se centra en todos los instrumentos de a bordo y en el material de trabajo, cuya responsabilidad cae mayoritariamente en el copiloto. Se presenta especial énfasis en la documentación obligatoria, tan importante que puede llegar a hacer tirar por la borda todo el trabajo previo a un rally si hay algo que no esté acorde con lo establecido.


También encontramos un capítulo dedicado a los elementos de seguridad, tanto en el auto como en el entorno del rally, además de un capítulo dedicado a los pilotos. En él, Romaní explica las distintas técnicas de conducción empleadas en los rallies, las cuales varían según el terreno en el que se participe, además de poner ejemplos basados en los pilotos más destacados.





A partir de aquí viene una de las partes más importantes del libro. En primer lugar, el autor presenta dos capítulos específicamente dedicados a la labor de los copilotos. Por un parte, describe las funciones principales de éste, que van más allá que simplemente cantar las notas. Responsable principal de las siempre importantes labores administrativas, la figura del copiloto es indispensable para lograr el éxito.


En segundo lugar, y no menos importante, se nos presenta un capítulo exclusivamente dedicado a las notas. Se trata de uno de los capítulos más interesantes del libro, ya que el autor pone en liza todo su conocimiento para dar una clase magistral sobre este elemento tan característico de esta disciplina del motor. Desde el proceso de toma de las notas, los consejos para su redacción, además de tener una muestra de ejemplos de notas de los distintos estilos, para todo copiloto amateur este capítulo es imprescindible.




Los capítulos siguientes hablan sobre todo el trabajo que conlleva un rally. Empezando por la coordinación del equipo, ya sea de uno privado como de uno oficial de una marca, con las claras diferencias que hay entre ambos. También toda la preparación previa de un rally, con especial énfasis en el reconocimiento (Recce) y en qué consiste, y la siempre presente labor administrativa.





Y finalmente la hora de la verdad, el autor nos explica cómo se vive un rally desde todos los puntos de vista, desde las verificaciones técnicas hasta el momento de la vuelta a casa, pasando por un tema muy importante como es la elección de los neumáticos.




En el último capítulo se aconseja de manera breve cómo hacer una búsqueda de sponsors y qué aspectos se deben tener en cuenta para ello.


Al final del libro encontramos unos apéndices, donde el autor explica de manera resumida la historia de los rallies, nos cuenta anécdotas vividas durante su carrera deportiva y nos presenta un glosario de términos utilizados habitualmente, además de un diccionario español-inglés de palabras técnicas, muy útil para quien se quiera adentrar en el mundo de la competición.




EL DATO
Se trata de un libro sumamente difícil de conseguir. Mi recomendación es buscar en páginas de venta de segunda mano, como por ejemplo MercadoLibre o Yapo, aunque en páginas españolas como Todo Colección o Wallapop puede ser más probable encontrarlo. Sino, la otra opción es adentrarse en foros de automovilismo o específicos de rally, donde puede haber algún aficionado que pueda compartirlo en formato pdf.

OPINIÓN PERSONAL
Considero que Manual de Rallies es una de las mejores publicaciones que se pueden encontrar sobre esta disciplina, y sin duda la más completa escrita en español. Tanto para aficionados a los rallies que quiere profundizar más en su conocimiento sobre esta disciplina, como para pilotos amateurs que quieren empezar a competir y necesitan consejos para ello, Manual de Rallies debe ser lectura obligatoria.
Romaní logra plasmar toda su experiencia y su conocimiento de manera muy atractiva para el lector, gracias al uso de un vocabulario simple y una redacción adecuada, lo cual facilita su lectura.
En resumen, Manual de Rallies es un libro que todo fanático del deporte motor, y en especial de los rallies, debe tener en su biblioteca.

NOTA 10/10

martes, 10 de marzo de 2020

Mujeres y automovilismo (I): Michèle Mouton

El pasado 8 de marzo se celebró el Día Internacional de la Mujer. Para conmemorar este día, quería comenzar una nueva serie en el blog repasando el papel de las mujeres en el automovilismo.
Tradicionalmente se ha dicho que el automovilismo es un mundo exclusivo de hombres y que las mujeres no tenían cabida en él. Nada más lejos de la realidad. 
Veremos el gran papel que han tenido las mujeres en este mundo, desde el papel de pilotos hasta de ingenieras y jefas de equipo.
Para empezar estas serie quería hablar sobre la que probablemente sea la mejor piloto que ha manejado un auto de carreras, la francesa Michèle Mouton.


Mouton nació el 23 de junio de 1951 en la localidad de Grasse, en la Riviera francesa. Tras acabar sus estudios de secundaria, comenzó la carrera de derecho en la universidad, pero pronto lo dejó para dedicarse a su gran pasión, el automovilismo. En 1972, su amigo Jean Taibi le pidió realizar el reconocimiento para el Tour de Córcega con él, para terminar siendo su copiloto al año siguiente en Montecarlo, en lo que fue la primera prueba de la historia del WRC.
Su padre le sugirió entonces pasarse a la butaca del piloto, comprándole un Alpine-Renault A110 y ayudándola económicamente durante el primer año. Tras unos buenos resultados a nivel nacional, hizo su debut como piloto en el Tour de Córcega de 1974, acabando en 12° lugar, siendo 7° al año siguiente. En ambos años se coronó campeona de Francia de rallyes en categoría femenina, mientras que fue subcampeona general en Grupo 3.

Con su Alpine-Renault A110 en el Tour de Córcega de 1975
En 1975 además se aventuró en los circuitos, participando en la edición de aquel año de las 24 Horas de Le Mans. Formó un equipo 100% femenino junto a Christine Dacremont y Marianne Hoepfner, con las cuales logró la victoria en la categoría de prototipos de 2 litros.

El Moynet LM75, con el que logró la victoria en la categoría de prototipos de 2 litros en las 24 Horas de Le Mans de 1975
Estos grandes resultados impresionaron a la compañía de lubricantes Elf. Mouton fichó por Fiat para 1977 para manejar el 131 Abarth, con el cual tuvo éxito de inmediato, logrando un 8° lugar en el Tour de Córcega. Fuera del WRC, llevó al Porsche Carrera RS a la victoria en el RACE Rallye de España, perteneciente al Campeonato de Europa, del cual fue subcampeona general y campeona femenina. Además, logró nuevamente el título francés femenino. En 1978 logró la victoria en el Tour de France con el 131 Abarth, finalizando en 5° lugar en el campeonato europeo y 4° en la Copa FIA para pilotos. Por su parte, en 1979 logra el subcampeonato general en el campeonato francés, además de un 7° y 5° puesto en Montecarlo y Córcega respectivamente.

En el Fiat 131 Abarth participando en el Tour de Córcega de 1979
Gracias a sus buenos resultados, Mouton fue elegida por Audi Sport para formar parte del equipo oficial que preparaba el asalto al WRC, junto a Hannu Mikkola. En 1980 se encarga junto a sus compañeros de desarrollar el Audi Quattro, que en ese momento era el primer vehículo de rally capaz de producir 300 CV y de tener turbocompresor y tracción a las 4 ruedas. Sin embargo, este no tenía la homologación de la FIA todavía, por lo cual sólo podía participar como vehículo 0 en los rallyes.

En 1981 se produjo el debut competitivo del Quattro. En Montecarlo, Mouton se vio obligada a abandonar antes de comenzar debido a problemas de motor. En Portugal, donde comenzó su larga colaboración con la copiloto Fabrizia Pons, finalizó en 4° lugar, a lo que le siguieron sendos retiros en Córcega y Grecia. Más tarde debutó en el famoso Rally de los 1000 Lagos en Finlandia, donde logró finalizar en 13° lugar, en un rally dominado tradicionalmente por pilotos nórdicos.

Con el Audi Quattro en Portugal, en 1981.
En octubre llegaría el Rally de Sanremo, en el sur de Italia, que se disputaba en una superficie mixta de grava y asfalto. Tras una durísima lucha con Henri Toivonen y, sobretodo, Ari Vatanen, Michèle Mouton lograba la victoria, convirtiéndose en la primera y única mujer hasta el momento en lograr una victoria en un rally del WRC. Su actuación en Sanremo dejó a todos sus rivales boquiabiertos, en especial a Vatanen, quien había asegurado ese fin de semana que nunca podría perder frente a una mujer.


Fabrizia Pons y Michèle Mouton, haciendo historia en Sanremo 1981
Con estos resultados, Mouton finalizaría en 8° lugar en el campeonato, mostrando sus indudables cualidades al volante y erigiéndose en protagonista del rally mundial.

Si en 1981 fue la revelación, 1982 fue el año de su consagración. Tras un difícil comienzo de temporada, logró la victoria en el Rally de Portugal tras ganar 18 tramos. Repitió victoria en el Acrópolis y en Brasil, lo que la colocó en la pelea por el título con Walter Röhrl. El título se decidió en la penúltima fecha, en Costa de Marfil. Poco antes del comienzo, Mouton recibió la noticia del fallecimiento de su padre, quien perdió la batalla contra el cáncer.
Tras una gran batalla entre ambos pilotos, en condiciones durísimas, fue Röhrl quien logró la victoria en el rally y en el campeonato, después de que Mouton tuviera un accidente que la obligó a abandonar.
Mouton finalizó en 2° lugar en el último rally de la temporada el Rally RAC de Gran Bretaña, ayudando a Audi a coronarse campeón del mundo de constructores. 

Mouton en el Rally de Brasil de 1982
En 1983 Audi presentaba su nuevo auto, el Quattro A1, en lo que marcaba el inicio de la era del Grupo B. Además, llegaba al equipo el sueco Stig Blomqvist, quien se unía a Mouton y a Mikkola. No logró ninguna victoria durante la temporada, pero gracias a 3 podios en Portugal, Kenia y Argentina, logró finalizar el campeonato en 5° lugar. Su compañero Hannu Mikkola se coronó campeón del mundo, mientras que Audi no pudo revalidar su título de constructores, perdido frente a Lancia.

En Sanremo 1983
Al año siguiente Audi fichó a Walter Röhrl, quien se unía a Mikkola y Blomqvist. Esto provocó que Mouton participara de forma parcial en el campeonato de 1984. En su primera participación del año en Suecia, lograría el que sería su último podio, con un brillante 2° lugar detrás de Stig Blomqvist. Tras tres retiros en Kenia, Grecia y Finlandia, y un 4° puesto en Gran Bretaña, finalizó el campeonato en 12° lugar.
Fuera del WRC, debutó en la famosa Subida Internacional al Pikes Peak, logrando la victoria en la categoría Open y siendo 2° en la general, delante de vehículos más potentes.

En el Rally RAC 1984
Mouton fue relegada a piloto de pruebas para 1985, participando únicamente en un rally del WRC, en Costa de Marfil. En dicho rally se vio envuelta en una polémica junto a su equipo, ya que fueron acusados de haber cambiado el auto original por el auto de servicio, tras haber sufrido problemas de motor. Dichas acusaciones nunca pudieron ser probadas y, a pesar de ello, Audi decidió retirar el auto de la piloto francesa. Además, Mouton participó en el prestigioso Campeonato Británico de Rallyes, en lo que fue una temporada para el olvido. Penalizada por numerosos problemas mecánicos, sólo terminó uno de los 6 rallyes del campeonato, finalizando en 10° lugar con sólo 12 puntos.
El mal año en los rallyes fue compensado con una impresionante victoria general en la Subida Internacional al Pikes Peak con su Audi Sport Quattro, batiendo el récord logrado por Al Unser Jr en 1982 por 13 segundos. Ello irritó a sus rivales masculinos, entre ellos Bobby Unser, quien vociferó en contra de la piloto francesa, quien le respondió "si tienes pelotas puedes correr contra mi hacia abajo también" (en referencia al sentido contrario de la ruta de la competencia)


En 1986 dejó Audi para unirse a Peugeot, dominador en aquel momento en el Grupo B con el 205 Turbo 16. Participó en el Campeonato Alemán de Rally donde, a diferencia del año anterior, su campaña fue todo un éxito. Junto a su nuevo copiloto, el británico Terry Harryman, logró la victoria en 6 de los 8 rallyes, coronándose campeona. En ese momento, Mouton hacía historia al convertirse en la primera mujer en lograr un campeonato en la disciplina de los rallyes.
En el WRC, su participación se redujo a 2 pruebas, Montecarlo y Córcega, retirándose en ambas. Aquella edición del Tour de Córcega fue la que marcó el final del Grupo B, tras el fallecimiento de Henri Toivonen y su copiloto Sergio Cresto. A finales de aquel año, tras la prohibición oficial de dichos vehículos, Mouton decidía retirarse de la competición.

Celebrando la victoria en el campeonato alemán de rally
Tras su retiro, cumplió su deseo de formar una familia junto a su pareja, el periodista Claude Guarnieri, con el nacimiento de su hija Jessica en 1987. En 1988 fundó junto a Fredrik Johnsson la famosa Carrera de Campeones, en memoria de Henri Toivonen. En dicho año y al año siguiente participó en el Rally París-Dakar como vehículo de asistencia para el equipo Peugeot, repitiendo experiencia como vehículo de prensa en 2004 y 2009. En marzo de 2012 fue inducida al Salón de la Fama del WRC.

Junto a Fredrik Johnsson, cofundadores de la Carrera de Campeones
En el año 2009, se convertía en la primera presidenta de la FIA Women in Motor Sport Comission, puesto que aún ocupa actualmente. Dicha comisión tiene como misión promover el papel de la mujer en el deporte motor en todas sus facetas.


Michèle Mouton encarnó la figura de la mujer que rompió todos los esquemas en el deporte motor. En un mundo tan machista como es el automovilismo, más aún en los años 70 y 80, Mouton logró pelear de tú a tú con los hombres (y vencerlos) en una época donde los autos requerían de una fuerza física y mental superior a la de los vehículos actuales, demostrando que las mujeres están más que capacitadas para manejar autos de carreras. Ella sin embargo nunca se puso la meta de vencer a los hombres, sino ponerse a su mismo nivel, cosa que logró con mucho éxito.
Es descrita como la piloto más exitosa de todos los tiempos, además de ser la referencia para todas las pilotos que se adentran en este mundo. Grandes pilotos como Stirling Moss o Niki Lauda la calificaron como una de las mejores e incluso como una Súper Mujer.

Junto a Fabrizia Pons, su copiloto durante muchos años
Sin embargo sus aportes no se terminaron con su participación deportiva. Gracias a su acción en la FIA Women in Motor Sport Comission, el papel de las mujeres en el automovilismo ha ido en franco aumento en la última década. Ya no es raro encontrar mujeres participando en las competiciones más importantes del deporte motor, incluso como ingenieras y como jefas de equipo. 
A pesar de ello, todavía queda mucho por hacer, y la propia Mouton lo sabe.

Junto con Susie Wolff, Claire Williams y Marta García en una rueda de prensa

Hasta aquí la historia de hoy. Un pequeño homenaje para una mujer que revolucionó el automovilismo en los años 70 y 80, y quien no se vio amedrentada por las críticas y burlas machistas de sus compañeros de profesión, consiguiendo grabar para siempre su nombre en la historia de este maravilloso deporte.


Esta es la primera entrega de esta serie. Jutta Kleinschmidt, Fabrizia Pons, Leena Gade, Susie Wolff, Monisha Kaltenborn, son sólo algunas de las protagonistas de próximas entregas, así que estén atentos.

Hasta entonces, saludos y pedal a fondo!!!